No dejes de confiar y de creer en lo que Dios un día te prometió. Aunque hoy la circunstancia puede ser difícil, recuerda que VAMOS DE VICTORIA EN VICTORIA DE LA MANO DE DIOS.
No dejes de confiar y de creer en lo que Dios un día te prometió. Aunque hoy la circunstancia puede ser difícil, recuerda que VAMOS DE VICTORIA EN VICTORIA DE LA MANO DE DIOS.